miércoles, 21 de marzo de 2012

Reflexión sobre mi insanía mental

La única pregunta que me nace en este momento, después de un día infernal, agotador, pero extrañamente reconfortante: ¿Qué se espera de nosotras?!

Sinceramente sigo medio acelerada... diría trastornada, pero eso es bastante habitual en mí y no señalaría el punto al que estoy tratando de llegar. Acelerada. Aceleradísima... pasada de rosca.
A mi tierna edad de 21 añitos -pfff- ando todo el día corriendo de acá para allá, intentando cumplir con las expectativas que la sociedad depositó alguna vez sobre mi... y que no tengo muy en claro cuándo, porque de ser así podría abocarme a diseñar una puta máquina del tiempo y alterar drásticamente el curso de las cosas!

Facultad, trabajo, gimnasio, amigos, familia (llámese: hacer presencia en casa)... "chongo", por llamarlo de alguna manera... ¿Cómo es posible lograr toooodo eso en un solo día? Y no me olvido de dormir, claro está, mi deporte favorito después del "sexo con amor pero bien salvaje-pulenta".
Simplemente hoy, siento que no doy abasto, que no puedo cumplir correctamente con todos esos -putos- roles que se esperan de mí.-
Y ahí es cuándo me pregunto si realmente es así: ¿Es la sociedad la que espera todo esto o simplemente es mi súper yo demandandome más y más desde el fondo de mi inestable psiquismo?

Pensemos que concientemente mis deseos en este momento se resumen en uno solo: DORMIR. Dormir un mínimo de 8 horas por día, ni más ni menos...
Ahora bien, si me adentro un poco más en la parte conciente de mis aspiraciones, YO soy la que desea recibirse, ganar dinero, tener un cuerpo increíble, conservar intacto mi grupo de amigos conforme pasan los años, asegurarme de que mi familia esté bien, y por supuesto, tener una actividad sexual de puta madre!
¿Qué carajo habrá hecho mi madre cuándo yo era niña como para que me exija de esta manera?
Mamá, te amo, pero te odio ahora mismo... ¿Estaré en peligro de sufrir algún día un brote psicótico del que no halla vuelta atrás?

Ok, demasiado viaje dentro de mi misma... La conclusión a la que he llegado - incompleta, claramente- es "SI". La sociedad SI espera que yo pueda cumplir con esos roles; SI, es posible lograr todo eso en un día - a costa de sacrificar unas cuántas horas de sueño- y SI, estoy loca, al igual que mi madre...
Pero a pesar de estar mental y físicamente agotada, agobiada e inestable... Soy feliz haciéndolo. De otra forma, no merecería la pena vivir...

Que complicadas somos las mujeres.

No hay comentarios:

Publicar un comentario